La Cueva.

UNA CASA EN VALLE ESCONDIDO

 Lo más representativo del proyecto es la idea: elementos que se descomponen/componen, casi laberínticamente, a medida que se llega a la esquina, intentando acercar esta casa a la idea de la cueva como refugio primigenio.

El concepto es la generación de un espacio propio, la casa cerrada hacia el exterior común y abierta hacia el interior – patio (aprovechando, en este caso, la orientación N – NE).

Como detalle del concepto, la puerta de entrada se esconde entre los quiebres de los muros que conforman la “cueva” (simbólicamente, el ingreso es antes, en la guardia, esto representa una imaginaria seguridad. "Cuando cruzo la guardia ya estoy en otro espacio, desde donde el ingreso a la casa es algo que transcurre lógicamente") esta resolución a su vez otorga privacidad total.

 El proyecto se presenta con un lenguaje simple, cuya complejidad reside en la comprensión espacial. Rechaza toda ornamentación procurando la máxima claridad de expresión de los materiales por si mismos, como predominantes:
Hormigón – Piedra – Madera y Vidrio.